EL AGUIJÓN
ULTIMÁTUM
POR: ARTURO MOLINA

Régimen invitó el 22-02-19 a
concierto en la frontera venezolana del Táchira, con El Rosario, Norte de
Santander, Colombia, pero no llegaron los artistas, y la tarima sirvió para
discursos bobalicones de trasnochados revolucionarios mostrando armas de guerra
(fusiles), con el propósito de sembrar temor a los habitantes, quienes no solo
les repudian y desobedecen (85,4% Meganalisis del 13 al 16-02-19), sino se
burlan de sus mamarrachadas, sumando un grueso de personas que en el ayer les
apoyaron, resultado del pensamiento político arcaico, dañino, perverso, que ha
jugado con las bondades de seguidores, creyentes de sus manipulaciones.
Del lado colombiano se vio
ese mismo día 22 (hasta que el régimen tumbo la señal a través de su esbirro
CONATEL), un canto a Venezuela por la paz, entendimiento, derecho a la vida,
libertad y esperanza. Concierto base para recaudar fondos a favor de Ayuda
Humanitaria que necesitan miles de ciudadanos que mueren de mengua por falta de
alimento, medicina y alto costo de la vida, inducido por el socialismo siglo
XXI, acatando instrucciones del Castro comunismo que tiene secuestrado por más
de 60 años a los ciudadanos cubanos.
El 23 de febrero lo van a
recordar los venezolanos como el día de la depravación de Maduro y su entorno.
Las balas se hicieron presente para aniquilar a ciudadanos que defienden el
derecho a la vida y lo hacían con las manos en alto. Gritaban a una sola voz “dejen
entrar la Ayuda Humanitaria”, el “por favor” brotaba de los labios de esos
cientos de personas que se mostraron para que el mundo viera el drama existente
en Venezuela. En el lugar se encontraban Diputados de la Asamblea Nacional
(Edgar Zambrano-primer vice presidente, Carlos Prosperi, Alexis Paparoni, William
Dávila Barrios, entre otros tantos), los Gobernadores de Táchira (Laidy Gómez),
Mérida (Ramón Guevara-tachirense) y Anzoátegui (Antonio Barreto Sira), quienes
nunca abandonaron a los ciudadanos, caminaron con ellos y sufrieron los embates
de las bombas lacrimógenas lanzadas por los esbirros del régimen. No bastó al déspota
del régimen disparar, también quemaron cargamento de medicina y alimento que ya
se encontraba del lado venezolano. El oficialismo cruzó la línea, se tragaron
la luz, y ahora tendrán que asumir las consecuencias.
Delitos diversos abrazaron
el régimen y parte de las fuerzas armadas el 23-02-2019 contra los ciudadanos,
desde negar el libre tránsito de vehículos y personas, disparar, quemar
alimentos y medicina, robar equipos a periodistas, agredirlos, detener a
funcionarios de Protección Civil Táchira y Mérida, hasta asesinar 14 personas (ocurrió
en Santa Elena de Uairén, Estado Bolívar), y más de 285 heridos (registros de
la OEA), son parte del inmenso expediente que agrupa la justicia internacional.
Delitos consagrados de Lesa Humanidad en tratado de Roma, Convención de Ginebra,
ONU, OEA, e incluso tipificados en algunos casos como Exterminio. Así ha
actuado y sigue actuando el régimen y su banda de asesinos, quienes sin duda
alguna recibirán en próximas horas ultimátum de la comunidad internacional para
el desalojo del poder. Los días están contados. Todo inicio tiene un final,
cada quién decide como lo quiere.
ARTURO MOLINA
@jarturoms1
www.jarturomolina.blogspot.com