EL AGUIJÓN
HAY
HAMBRE EN HOGARES VENEZOLANOS
POR: ARTURO
MOLINA
@JARTUROMS1

La solicitud de factores
adversos al régimen de permitir abrir canal humanitario para favorecer a los
ciudadanos y ayudar a aliviar el difícil momento por el que se transita,
producto de la ignorancia de quienes gobiernan, se desecha con arrogancia por
parte del oficialismo. Su mediocre pensamiento pretenden imponerlo a la fuerza.
La inestabilidad hace
ruido en cada rincón del país. La intranquilidad mueve el piso en cada hogar.
La angustia crece, y con ella la desesperanza. La indolencia se ha apoderado de
gobernantes desesperados por el lucro ilícito. La presencia de catástrofes naturales
desnuda la naturaleza perversa de los revolucionarios siglo XXI, quienes niegan
recursos a pobladores, pero ofrecen millones de dólares a otros países.
El régimen pretende el
silencio a base de la compra de conciencia de los ciudadanos. Anuncian incrementos
salariales cuya finalidad real es terminar de destruir la empresa privada para
alcanzar la dependencia absoluta de las personas a sus migajas. La entrega
controlada de las bolsas de alimentos llamada clap es una parte de su
estrategia. Lo consiguen a medias, pero no notan el dolor que hay al interior
de las personas por el abuso.
Ya la vergüenza disimulada
dejo de existir en el oficialismo. El dólar llamado DICOM (controlado por el
régimen) está por encima de los 11.000 bs, y el negro o paralelo nada en las
aguas de los 17.000 bs. Toda una locura auspiciada por quienes han hecho de
Venezuela el paraíso para la corrupción y el lucro a costa del sufrimiento de
sus ciudadanos. Es el oficialismo quien controla el ingreso y venta de divisas
al país, en consecuencia, es el oficialismo quien promueve los desequilibrios económicos,
para lucrar a algunos de sus revolucionarios, empobrecer a los ciudadanos, y
quebrar la empresa privada. Es el régimen quien auspicia el dólar negro. Son
los responsables directos de las necesidades que padecen las personas.
El cartón de huevos
alcanza precios por encima de los 25.000 bs; el kilo de carne los 22.000 bs;
los espaguetis 13.5000bs; el plátano en 2.500 y 3.000 bs por kilo; la leche en
polvo en 70.000 u 80.000 bs; el pollo por encima de los 15.000 bs kilo; aceite
en 20.000 bs; queso en 20.000 bs kilo; tomate en 7.500 bs kilo; cebolla en
5.000 bs kilo; pan en 6.000, 7.000 y hasta 8.000 bs por unidad; medicamentos que sobrepasan los 30.000 y hasta
70.000 bs (los que se consiguen). Decirlo es una cosa, poder adquirirlos es
otra. Hay hambre en los hogares venezolanos.
ARTURO
MOLINA
www.jarturomolina.blogspot.com