EL AGUIJÓN
LA
SALIDA SIGUE SIENDO ELECTORAL
POR: ARTURO MOLINA
Las redes sociales se han
convertido en el centro del debate político de la crisis económica y social
padecida por los venezolanos. Hay opiniones centradas, que ameritan ser
atendidas. Otras son el vomitivo del odio que llevan algunas personas, y que
pretenden seguir imponiendo salidas fantásticas para resarcir su ego. Hay
también los que reenvían mensajes fuera de contexto y se escudan en “así me
llegó”. Mi abuela Agripina (adeca hasta la médula) tenía un loro, y todas las
mañanas decía “el que no tiene argumento, se suma al rebuscado y ofensivo, y
los repite”.
Los desaforados comienzan a
dar fe de su charlatanería. El chisme es lo medular de su contenido. Llevan
intrínseco en su conciencia el mercantilismo político. Así actúan y lo
proyectan en los demás. La opinión disidente no solo es perseguida, atropellada
y ultrajada por el régimen, también lo es para los adulantes del abismo,
amantes de la guerra y el correr de la sangre, quienes aspiran la conquista del
poder por la vía de facto. La excarcelación del joven Juan Requesens les llevó
de inmediato a los pendencieros, a crear laboratorio sucio en contra de quienes
habían trabajado para lograr el cambio de la cárcel por la casa. Hasta en
contra del propio Requesens lanzaron dardos venenosos. Les encanta a esos parlanchines
ver a los demás comer estiércol, mientras ellos disfrutan de los placeres de la
libertad. Son ruines y se dejan ver como ovejas.
La posición política de
oposición, ya no es de las instituciones o las personas, ahora tienen nuevo
dueño: los radicales de derecha e izquierda, quienes decidieron ser los amos de
la disidencia. Aprendieron del oficialismo a atacar y esconderse. El lenguaje
bufo es su artilugio. Los ciudadanos viven permanentemente sobrecargados de
desinformación, generándose malestar y desconfianza. Ese es el objetivo. El
desprestigio lo apuntan hacia liderazgos que les pueden mover la mesa y
estropearles sus irracionales intenciones. Los desacuerdos solo podrán ser
acuerdos si a esa minoría les parece. Gastan millones en publicidad para crear
la matriz de opinión que persiguen. En oportunidades lo logran, en otras
fracasan. Están y viven para eso.
Los venezolanos deben asumir
la solución de sus problemas. Nada vendrá por entrega de regalo. El cambio del
sistema de gobierno urge. El militarismo-comunismo avanza en cerrar la salida
constitucional. La abstención es la estrategia de factores autocráticos,
dictatoriales y mercantilistas. Son los representantes de las aves de rapiña,
promotores de soluciones mágicas para fortalecer el status quo reinante. La
barbarie gobierna porque así se lo han permitido y hasta “convenido” los
radicales de izquierda y la derecha. La salida sigue siendo la electoral.
Arturo Molina
@jarturoms1
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jarturomolina@gmail.com