EL AGUIJÓN
DOCENTES
EN RESISTENCIA
POR: ARTURO MOLINA

El oficialismo hace uso del
desprestigio contra los dirigentes gremiales para camuflar sus verdaderas
intenciones. A las universidades buscan bloquearles su presupuesto, y activan
estrategia de ofrecimientos banales a estudiantes, personal administrativo y de
apoyo con la finalidad de ganarlos a su objetivo centralizador para quebrar la autonomía
conquistada en democracia. La protesta de hombres y mujeres que forman parte
del sector apunta a la paralización total de actividades de no ser reconocidos
sus derechos. El limbo jurídico creado por los revolucionarios siglo XXI trae
malestar social. Padres y representantes ven con perplejidad la insensatez del
oficialismo.
Aún con política excluyente
del régimen, hay líderes que se han establecido políticas públicas en el área
social para ayudar a paliar la crisis por la que se viene atravesando. Es así
como en la Gobernación del Táchira y por impulso de la Gobernadora Laidy Gómez
se sostiene esfuerzo de mantener sistema de seguridad social de atención a los
funcionarios del Ejecutivo Regional, único
en el país, sin reserva partidista, a través de convenios con empresas
prestadoras de servicios en la materia, los cuales se incrementan en corto
tiempo. Tal hecho acontece con empresas como CONAMEC, quien atiende a los
funcionarios del ente centralizado en 25 especialidades médicas y varios exámenes,
de lunes a viernes, allí entran los educadores activos, jubilados,
incapacitados y pensionados. Con empresa FRASECA, para hospitalización y cirugía
por un monto de tres millones quinientos mil bolívares (3.5000.000 bs), que
cubre a los funcionarios de ente centralizado y descentralizado. También entran
los educadores. Igualmente existe el servicio funerario para seis miembros de
la familia de los funcionarios entes centralizado y descentralizado, orden
ascendente o descendente (allí también están los educadores), incluso si los
padres ya fallecieron, pueden ingresar a dos hermanos, convenio establecido con
la empresa SERVIFRASECA, que oscila en tres millones quinientos mil bolívares
(3.500.000 bs) y que a partir del mes de noviembre sube a cuatro millones de
bolívares (4.000.000 bs).
Los educadores venezolanos
exigen la atención integral. Son la sangre que nutre a las nuevas generaciones
en proceso de formación académica. La desigualdad y atropello imperante desde
el escenario de los revolucionarios siglo XXI les une y se mantienen en
resistencia.
ARTURO MOLINA
@jarturoms1
www.jarturomolina.blogspot.com