EL AGUIJÓN
DEMOCRACIA VS CHANTAJE DE LAS
MACOLLAS
POR: ARTURO MOLINA
El cambio impuesto por el régimen con su famoso socialismo
siglo XXI ha servido a un sector de la oposición para imitar la propuesta y aplicar
sus condiciones en el escenario político nacional. Le ha gustado la circunstancia
de poner y quitar a su gusto y placer, obviando reglas fundamentales en la
expresión del sistema democrático, el sistema de libertades.
La democracia es la doctrina política favorable a la
intervención del pueblo en el gobierno, o visto de otra forma es el predominio
del pueblo en el gobierno político de un Estado, pero ese pueblo no es soberano
al pretendérsele encasillar, limitando su autoridad suprema e independiente en
la selección de sus representantes o en las decisiones que le conciernen en el
entorno de su espacio geográfico, sea éste de carácter nacional, regional o
local, violando flagrantemente su condición de ciudadanos, sujetos de derechos
políticos que intervienen en el gobierno del país.
La antidemocracia asume en consecuencia preeminencia sobre
los asuntos y decisiones políticas al secuestrarlas, y el chantaje simulado
toma fuerza como estrategia para neutralizar oponentes en la medida que los
ciudadanos faciliten a los disfrazados de demócratas avanzar en sus acuerdos.
Las macollas aprueban a través de personas lo que corresponde a la sociedad,
burlando en consecuencia el sentir de los ciudadanos, valiéndose de las necesidades
presentes.
Alcanzar cambios reales en democracia requiere de demócratas en
el ejercicio del poder, y esa posibilidad se esfuma si ante las imposiciones y
el chantaje prevalece el miedo y el desespero. Las opciones deben ser examinadas
por los ciudadanos con sumo cuidado a la hora de decidir. La expresión “están
dividiendo” hay que revisar de donde viene y quienes la promueven. La
polarización le conviene a los sectores que se encuentran actualmente en el
ejercicio del poder, tanto del régimen como de un sector de oposición.
La solución a los problemas presentes en suelo venezolano
pasa por el reconocimiento y respeto al contrario, en correspondencia con
propuestas responsables y aplicables. Los ciudadanos tienen la palabra y el
voto para validar o desechar las prácticas manipuladoras de las élites en las elecciones
de la Asamblea Nacional, y salirle al paso a las pretensiones abusivas de
particulares en detrimento del país y sus ciudadanos; la apuesta es: democracia
vs chantaje de las macollas.
TRINCHERA
TACHIRENSE: www.jarturomolina.blogspot.com