EL AGUIJÓN
LOS
ACUERDOS DE LA MUD
POR: ARTURO
MOLINA
Twitter:@jarturomolina
E-MAIL: jarturomolina@gmail.com
La
intención del presente artículo no es la de satanizar, dañar, ni dividir nada,
ni a nadie; es concebido con la sinceridad y el reclamo escuchado de gente
vinculada a la alternativa democrática, quienes se sienten desplazados,
excluidos, utilizados por quienes tienen el poder de la oposición en los
actuales momentos.
En
un principio buscar formas de entendimiento por los sectores contrarios al
oficialismo, era un punto necesario, concibiendo el desprendimiento requerido
para canalizar mínimos acuerdos para el intelecto político, en el sentido de
darle dirección, coherencia, forma, orientación y consolidar estrategias que
permitieran avanzar en la suma de voluntades ante el desorden presente por las
actuales autoridades nacionales y su desviada gestión de gobierno, trastocando
los intereses del pueblo.
El
entendimiento lamentablemente se traduce a los aspectos electorales,
fracturando la esencia requerida: acuerdos para proyecto país. El tiempo ha
demostrado que mantener durante un largo periodo esta forma de alcances, termina
por generar desigualdades y se establecen elites para beneficiar a algunos en
desmedro de otros, generando apatía; liquidando los apoyos requeridos para
avanzar en la consolidación del sistema de libertades.
Asumir
los resultados electorales obtenidos en el proceso de elección de gobernadores,
para desde allí diseñar la plataforma electoral a presentar al electorado con
miras a las elecciones municipales, es simplemente un ventajismo, que tal vez
beneficie en algunos estados a ciertas fuerzas políticas y en otros a otras,
pero al final, se favorecen a tres, cuatro o cinco factores, no la totalidad,
dado que eran estos quienes tenían como candidatos a sus representantes; igual
hubiese acontecido si el resultado a considerar era el de la elección
presidencial, ya que el factor político favorecido era el del candidato, por
ello la lucha por la tarjeta de la MUD.
Los
espacios locales tienen liderazgos propios, gente entregada a la lucha
comunitaria, quienes no militan en los factores políticos favorecidos, y que
ante esa circunstancia son excluidos; también se presentan casos de liderazgos
que no van a poder representar a su comunidad en el Concejo Municipal, porque
la distribución por circuito entre los factores políticos le deja fuera del escenario,
causando malestar y distancia con la fórmula acordada.
Las
primarias para la elección de Alcaldes (realizada con demasiada anticipación),
trajo un resultado que a casi dos años del mismo se ha respetado por la mayoría
de la población activa de la Alternativa Democrática, pero es prudente y
necesario reconocer que el tiempo avanza y cambia, y lo bueno de ayer, no tiene porque serlo hoy, ya
que la realidad muestra esos cambios, y es un deber revisarlos.
Hay candidatos a Alcaldes, que
pareciera están es optando a una Concejalía, y candidatos a Concejales a
Alcaldes; mientras eso ocurre, las plazas públicas están en la oscuridad; las
calles destrozadas; las aceras invadidas; las aguas negras corren al aire
libre; la basura tirada por las calles, generando todo tipo de enfermedades;
los lugares de esparcimiento son insuficientes. Se pecha al contribuyente, pero
no se devuelve la contribución.
El
ventajismo provocado por algunos va en consecuencia a hacer que se presenten
diversidad de candidatos a los Concejos Municipales, y en algunos casos a las
Alcaldías; tal vez la fuerza imprimida desde el seno de la elite de algunos
factores de oposición logren acumular la mayor cantidad de votos; lo cierto es
que la participación de la diversidad es necesaria y la propuesta por mejorar
la calidad de vida de las comunidades será al final el norte que implique la
decisión adecuada de los ciudadanos.