EL AGUIJÓN
¿CANDIDATO
PRESIDENCIAL O PROPUESTA DE PAÍS?
POR: ARTURO MOLINA
@jarturomolina
Trinchera Tachirense
(jarturomolina.blogspot.com)
La
enfermedad presidencial y la estrategia de no dar la información veraz a los
venezolanos, por parte de los usurpadores del poder bajo la tutela de los
hermanos Castro, “pareciera ser”, esta llegando a su final y al fin se sabrá la
realidad de la misma, más por la incapacidad de seguir escondiéndola, que por
el deseo de anunciarla a la opinión pública nacional e internacional.
Otros
países están ampliamente informados de lo que acontece en esta minúscula parte
del planeta, y algunos voceros no autorizados por gobierno alguno, se han
atrevido a desafiar a los usurpadores, para exigirles información de la salud
del presidente de Venezuela, llegando incluso a retarlos, como es el caso
reciente del señor Cochez, hasta hace quince días atrás: Diplomático Panameño.
El
desenlace de la película montada por los usurpadores, terminaría por el llamado
a nuevas elecciones presidenciales, (si se respeta el texto constitucional),
las cuáles se realizarían en un mes, contados a partir del anuncio respectivo,
y destacando lamentablemente, la incapacidad o el fallecimiento del actual
Presidente de la República.
El
conflicto se presentará tanto en los usurpadores como en las oposiciones, al
momento de seleccionar el representante para medirse en la nueva contienda
electoral, pues saldrán a la luz publica los candidatos o aspirantes a la silla
nacional, quienes desean constituirse como el nuevo o la nueva representante
del poder ejecutivo, “pareciendo” tener la papeleta con menos intensidad de
apremio el sector oficial.
Del
lado de las oposiciones la cosa se muestra con alto grado de dificultad, dado
que el aprieto de la situación del país requiere del tratamiento minucioso y
delicado, para afrontar los retos por venir, los cuales no son de forma, por el
contrario, son de fondo y complejos, tanto en lo económico, político, social,
cultural, educativo…y pare de contar.
Mientras
el oficialismo le sigue hablando al país del socialismo del siglo XXI, del lado
de las oposiciones se habla y se habla, pero nada que ver con propuestas claras
y contundentes, para rehacer la credibilidad y confianza de los electores, y
enrumbar al país por senderos de crecimiento y armonía, deseados por la mayoría
de la sociedad venezolana.
La
polarización existente, niega la posibilidad de generar debates claros y
contundentes en las propuestas que pudieran presentarse por diversos actores,
obligando en el caso de Las Oposiciones, a establecer acuerdos para alcanzar la
unidad electoral, beneficiando a algunos en claro detrimento de otros, y
enfrentar con cierta fuerza al sector usurpador, pero no se concreta bajo
ningún sentido la unión requerida para el logro del objetivo, y que bien
entendido debe ser el bienestar de VENEZUELA y sus ciudadanos.
Obligante
es, tanto para el oficialismo como para las oposiciones, revisar a profundidad
la situación del país, tal vez para los primeros plantearse rectificaciones, y
para los segundos ganar el respeto de los ciudadanos; para los primeros
incluso, programarse la posibilidad de ser la nueva oposición venezolana, y
para los segundos ser en consecuencia el nuevo gobierno; o tal vez, para los
primeros mantenerse en el poder, y los segundos seguir siendo las oposiciones;
pero, al final del camino, saliendo del mesianismo, prepotencia y arrogancia,
regresando el respeto a las instituciones y al Estado de Derecho, hasta ahora
en situación de precariedad y minusvalía ante el abuso de poder demostrado por
el sector oficial.
En
todo caso, sea este mes de marzo, o el de abril o mayo, la noticia se anunciará
y la elección presidencial se convocará y, en consecuencia, las diferentes
ópticas políticas de las oposiciones, deben plantearse con mucha seriedad el
país requerido actualmente, para poder avanzar con claridad, hacia la trinchera
del dominio de la democracia y sus libertades, revisando a fondo, si el tema es
¿Candidato Presidencial o Propuesta de País?