EL AGUIJÓN
DESAPARECIERON
LOS REALES E IMPONEN CONTROLES
POR: ARTURO MOLINA

Programas de televisión por
allá en 1999-2000, les servían a los revolucionarios del siglo XXI para
anunciar al país las transformaciones que acometerían en infraestructura
educativa, hospitalaria, vialidad, agroindustria y repetían año tras año,
señalando el 2019 como el aterrizaje del desarrollo y progreso nacional. Mapa
en mano se indicaba la conexión ferroviaria que tendría Venezuela, para
facilitar el transporte de la producción y las personas hasta los lugares más
apartados. La explotación y comercialización gasífera. La llegada de miles de
turistas. Convenios iban y venían. Al finalizar cada alocución los adeptos al
régimen lanzaban morteros en barriadas y pueblos. La fiesta aparecía para
celebrar tal acontecimiento. Hasta dinero les daban a los seguidores de la
revolución para llevarlos a las concentraciones. Épocas de vacas gordas con
siembra estéril.
Millones de dólares supuestamente
fueron invertidos en centrales azucareros, empresas lecheras, tomateras,
cultivos verticales y horizontales, o hacia arriba y hacia abajo, de un lado
para el otro, polleras en apartamentos, plataneras, siembra de acetaminofén,
planta aceitera, complejos turísticos y habitacionales, autopistas, carreteras,
avenidas, calles,…de ello queda registro para la historia. En pleno sexto mes
del año 2019, se evidencia lo contrario a lo prometido en aquellos tiempos.
El peritaje les sirvió a los
revolucionarios siglo XXI para construir sistema corrupto y sustraer el erario
público en beneficio particular. Lo hicieron con pausa, mesura y disciplina.
Acabaron con las reservas internacionales, el fondo chino (convenio que hoy
cobran los señores asiáticos con creces), los ingresos petroleros. Hoy todo se
desmorona. Ese era el salto que en realidad aplicarían. Hacer que la pobreza
alcanzara para todos los ciudadanos, excluyendo a la élite gubernamental.
El oficialismo ha extendido
su brazo corrupto hacia la frontera venezolana con el lado colombiano,
facilitando la proliferación de grupos irregulares, especulación, matraca,
vacuna. Desde 2015 han cercenado el paso vehicular y peatonal a los habitantes
de la zona y a visitantes. Anuncian abrirla, pero todo es manipulación,
falsedad y aplicación de controles que incrementan humillación y corrupción. La
gobernadora del Táchira Laidy Gómez ha exigido el libre tránsito y activación
de aduanas desde años atrás, ahora lo reafirma de forma acertada y contundente.
Los revolucionarios siglo XXI aprendieron a ser magos y desaparecen las cosas y
bienes sin vergüenza alguna. Así lo hicieron con los reales de los venezolanos,
e intentan hacerlo con la sociedad.
ARTURO MOLINA
@jarturoms1
www.jarturomolina.blogspot.com