EL AGUIJÓN
TE
CREO NICOLÁS
POR: ARTURO
MOLINA
La crisis venezolana
vive cada momento con intensidad. El responsable del Poder Ejecutivo tiene
salidas diversas a cada situación, sin importar si las mismas son creíbles o no,
ante los eventos planteados, pero, escape es escape.
El escenario es siempre
el mismo, crear el conflicto, aguantar unas horas, y luego presentar la
solución a su conveniencia, para ganar tiempo y continuar violando el estamento
legal establecido.
La presión
internacional exigiendo al régimen se respete el Estado de Derecho, libertad de
presos políticos y convocatoria a elecciones, recibió como respuesta lo que los
revolucionarios siglo XXI aprendieron a hacer, dar Golpe de Estado, y se
valieron de los leguleyos impuestos en la Sala Constitucional del Tribunal
Supremo de Justicia con las decisiones 155 y 156, para dejar sin efecto las
atribuciones de la Asamblea Nacional, electa por más de 14 millones de
ciudadanos el 6D 2015.
El oficialismo se acostumbró
a gobernar sin límites. Los controles no son cómodos para su reinado y
perjudican sus negocios, ante eso, es simple, aplican: El Estado Soy Yo.
Expresión autoritaria que no vacilan en poner en práctica y desaparecen la
autonomía de los poderes públicos, llevando a esos cargos a funcionarios-
militantes, serviles a sus propósitos.
La declaración de la
Fiscal General de la República es la respuesta del funcionario castrado, frustrado,
cansado de ser sumiso del socialismo siglo XXI, y que recoge el diario oficialista
Ultimas Noticias, en cuerpo de política del 31-03-2017:
“Considero un deber
histórico ineludible, no sólo como fiscal sino como ciudadana de este país,
referirme a las decisiones del TSJ signadas con los número 155 y 156 de la Sala
Constitucional, en dichas sentencias se evidencian varias violaciones del orden
constitucional, una ruptura del orden constitucional. Es mi obligación
manifestar ante el país mi alta preocupación por tal evento”.
El representante del
Poder Ejecutivo asume actitud vacilante ante el Golpe de Estado, -posterior a
la declaración de la fiscal, antes guardo silencio- y achaca lo sucedido como
algo natural entre las diatribas que se “pueden generar entre los poderes
establecidos”, tratando de evitar ser señalado como conocedor y artífice en lo
acontecido por la magnitud de esas decisiones:
“Llamo a que este impasse sea superado
lo más rápido y con la mayor calidad posible. Todos los días surgen tensiones y
conflictos, yo me imagino cuántas tensiones y conflictos surgen entre la vida
diaria del Ministerio Público, el Poder Moral Republicano y el Poder Judicial”.
(UN-31-03-2017).
La irresponsabilidad
arropa a la clase dirigente del socialismo siglo XXI. Juegan con la paciencia
de los venezolanos y generan un impasse=callejón sin salida, obviando los
conflictos y tensiones que padecen todos
los días las familias venezolanas por la insensatez de su régimen
político-económico-social, al propiciar la miseria como bandera de vida.
La democracia venezolana
vive momentos de apremio. La dictadura arrecia para imponer sus condiciones de
vida. La libertad de expresión y de información es reducida por la vía de la
censura y auto-censura.
La decisión de la Sala
Constitucional del TSJ de dar Golpe de Estado al poder Legislativo Nacional,
trae consigo responsabilidades penales que no pueden ser zanjadas en reunión
entre revolucionarios para tapar la realidad.
Los ciudadanos rechazan
ser tratados como esclavos y resisten constitucionalmente el arrebato
presidencial y su socialismo siglo XXI. Las elecciones son la vía para superar
las diferencias.
ARTURO MOLINA
@JARTUROMS1
www.jarturomolina.blogspot.com