EL AGUIJÓN
PROVOCACIÓN
POR: ARTURO
MOLINA
La protesta estudiantil se ha propagado al seno de la
sociedad en general, quienes en forma decidida han salido a apoyarlos. El
manejo del conflicto por parte del gobierno es de permanente provocación. Ante los
medios de comunicación llaman a la paz, pero en el actuar es lo que menos
practican.
El Táchira es tierra de mujeres y hombres laboriosos, pacíficos,
estudiosos, respetuosos, apegados a la fe católica (en su mayoría) y soñadores.
Desde el Gobierno Nacional se nos ve como contrabandistas, paramilitares, con malos olores e ignorantes. Esa visión
equivocada y despreciable, hace el actuar de los gobernantes en dirección errónea
con nuestra gente y sus reclamos.
Pretender atemorizar al pueblo del Táchira con dos aviones
de guerra sobre volando San Cristóbal a muy baja altura, es un acto de
provocación que la sociedad rechaza. Amenazar a través de la radio, prensa y
televisión a los ciudadanos de este terruño, es confundir respeto con sumisión.
Los cacerolazos han sido la respuesta a tan lamentable desprecio a nuestra
tierra.
La violencia genera violencia y eso es lo buscado por el
gobierno; las actuaciones contra los estudiantes han sido represiones propias
de gobiernos no democráticos. Los muertos oficiales hasta la fecha 23-02-2014,
son 10; más de 500 detenidos y más de 137 heridos en el territorio nacional. El
trabajo de investigación adelantado por Ultimas Noticias, reflejo a la luz
pública de dónde surgió la violencia, lo contrario el gobierno culparía a los
estudiantes; el testigo en Valencia, de la forma en que dispararon los
perdigones a la joven estudiante, ahora fallecida, tumba la hipótesis montada
por el oficialismo para acusar a los estudiantes.
La denuncia del joven que fue violado con un fusil, desmonta
el discurso del gobierno, del trato dado a los detenidos, quienes han
manifestado el acoso y la tortura que les han propinado en los centros de
retención. Cada golpiza dada a los estudiantes ha sido filmada por un vecino,
por un ciudadano, que tal vez, no estando de acurdo con la protesta, ve sin
embargo como agreden brutalmente un reclamo; caso cómo el sucedido en la noche
de ayer 22-02-2014, son evidencia de tales acciones perversas, cuándo
funcionarios golpean (todos contra uno sólo) a estudiantes al frente de las
instalaciones de Farma Uno en la avenida España, destapando el odio que les han
sembrado contra la disidencia.
El
perdigonazo a quema ropa propinado por funcionario motorizado a un ciudadano
ayer 22-02-2014 a plena luz del día valiéndose de tener el arma y de ir acompañado
de un pelotón son elementos del desprecio hacia nuestra tierra y su gente. El
Táchira, sus ciudadanos reclaman respeto, y lo han hecho en potentes marchas
protestas; cada vez es mayor la participación del pueblo en las mismas.
La
evidencia de la violación a la protesta, del debido proceso, de la privación de
libertad con imputaciones amañadas, engrosará el expediente de violaciones al
estado de derecho y los derechos humanos por parte de los actuales gobernantes.
El reclamo por la seguridad ciudadana, la escasez generalizada, la corrupción,
la impunidad, alto costo de la vida, se resuelve con hechos, y lamentablemente
este gobierno sólo aprendió a decir palabras y mentiras, pretendiendo aplacar
la rabia con la provocación.