EL AGUIJÓN
EL TERRITORIO
ESEQUIBO ES DE VENEZUELA
POR: ARTURO MOLINA
El
gobierno de los llamados revolucionarios del siglo XXI ha generado dudas
incontables en el marco de las controversias que han salido a la luz pública
con base a la defensa del territorio nacional y sus fronteras. En innumerables
ocasiones las alertas se han encendido al escucharse denuncias sobre la
violación que grupos irregulares hacen de la soberanía nacional venezolana. En
algunos casos representantes de las autoridades gubernamentales desmienten los
hechos. Pero los acontecimientos acaecidos están en los lugares donde
sucedieron esos eventos, y esa memoria no es borrable en el tiempo.
El
reclamo por el territorio Esequibo ha sido a través de la historia un elemento
álgido para los gobernantes venezolanos, y por ende para sus habitantes. En las
costumbres de las llamadas potencias se encontraba el reparto de los
territorios que le eran ajenos. Burlaban lo que les parecía, e imponían a sus
anchas sus pareceres. Así se le arrebató el territorio Esequibo a Venezuela. Los
gobiernos del general Isaías Medina Angarita (+), y los gobiernos civilistas de
Rómulo Betancourt (+) y Raúl Leoni (+) de AD, por nombrar algunos, se plantean
formalmente la restitución de ese territorio, sustentados en elementos
probatorios de que el Esequibo es de Venezuela.
El
extinto presidente Hugo Chávez (+), en sus primeros años de gobierno confirmó
lo que sus antecesores habían plasmado sobre ese reclamo territorial, pero en
el año 2004, el 19 de febrero específicamente, en un cambio radical de su
política internacional dio concesiones al gobierno guyanés para que generaran
actividades en el mismo, con la finalidad de ganar apoyo de ese país en la
Organización de Estados Americanos (OEA), y otros organismos del hemisferio
como la Comunidad del Caribe (CARICOM). Al final lo que se evidencia es una
apropiación indebida por parte del gobierno de Guyana del territorio Esequibo.
Allí el gobierno nacional jugo a perder-perder.
La
estrategia equivocada del extinto presidente Hugo Chávez, hoy genera una nueva
polémica en los ciudadanos venezolanos, quienes son llamados a participar en
referéndum consultivo el próximo 3 de diciembre. Los adalides de la
polarización, que lideran los extremos radicales, apuntan a llamar a unos
traidores y a otros colaboracionistas. El guion es el mismo, ellos o nosotros. Todo
lo apuntan a lo político partidista. Sus argumentos no admiten disidencia,
menos coincidencias. En ese drama del odio, la conciencia ciudadana no tiene
valor alguno.
El
referéndum consultivo tiene que servir para que con la participación de los
ciudadanos se le recuerde al gobierno las obligaciones que tiene en la defensa
del territorio. El territorio Esequibo es de Venezuela.
ARTURO MOLINA
@jarturomolina1
jarturomolina@gmail.com