EL AGUIJÓN
DEL
ABSTENCIONISMO AL DIVISIONISMO
POR: ARTURO MOLINA
La encrucijada en la que se
encuentra sector radical de la oposición contra la oposición moderada, les hace
generarse cualquier auto-gol en cada palabra o acción que realizan. A la torpeza
de haber convocado a la abstención en cada proceso electoral que sabían se
podía ganar, apostaron a perder, alcanzando el sostenimiento del actual sistema
de gobierno en el poder. Los largos 23 años de desgracia generada por la
perversión y el abuso a los Derechos Humanos (DDHH), parece no les molesta, ni angustia,
tal vez, porque sus intereses no han sido tocados.
La prepotencia les ciega la
visión y aleja del presente. Viven en nube oscura y piensan que el chocolate se
lo beben caliente y con queso madurado, porque el gas doméstico no les falla.
No les falta en su mesa los tres platos y sus respectivas meriendas. Les
alcanza el sueldo para adquirir gasolina a precios internacionales, y en
escases les asignan estación de servicio especial. Duermen las ocho horas
diarias a placer y al levantarse ven por la ventana lo bien que están. Son tan
bien tratados, que con realizar llamada le llevan la bombona de gas llena hasta
la casa de habitación, e instalan. El covid19 es para ellos una entelequia, y los
gastos en medicina son centavos al ir a las clínicas. Tienen sus chinchorros
para procurar el descanso en sus hogares, al aire libre, sin ser atacados por
choros, perdón delincuentes, y leen novelas que son negadas para el resto de
los venezolanos.
El volar en el sueño del
país de la maravilla, les genera calidad en la prestación del servicio eléctrico,
y de ser cortado por el régimen, disponen de sendas plantas a gas o gasoil para
subsanar el problema. Transitan carreteras pavimentadas que irradian figura de
un paisaje de país desarrollado. Visitan playas que ayer eran cuestionadas por
el oficialismo como espacios de ricos en exclusión de los pobres, y les sacan
provecho a los hospedajes para los altos jerarcas gubernamentales. Conscientes
o inconscientemente se fuman el habano tratando de emular la forma en que lo hacía
Fidel Castro, y hasta escupen, perdón, que vulgar, esputen, el mismo veneno y
odio a rabiar. Olvidan el trato respetuoso y asumen la arrogancia como norte de
sus decisiones.
Lamentablemente la
incoherencia y ausencia de estrategia política, tiene a los líderes del ausentismo
en terreno movedizo. Anuncian querer participar en proceso electoral del
venidero 21 de noviembre, pero no se cuentan en elecciones primarias para
seleccionar candidatos únicos de oposición al régimen e imponer sus adeptos, y excluir
a sencillos dirigentes que se han ganado el derecho a ser postulados. Ya la inhibición
no les sirve, ahora apuestan a distraer a los ciudadanos con maniobras perversas
con el salto del abstencionismo al divisionismo.
ARTURO MOLINA
@jarturomolina1
jarturomolina@gmail.com