EL AGUIJÓN
2016
UN SUEÑO
POR: ARTURO MOLINA
Al cierre de 2015 e inicio de 2016, se abre la esperanza para
el cambio. Los deseos de millones de ciudadanos del mundo se encuentran
direccionados a la paz, salud, inclusión, eliminación de la pobreza, respeto y
progreso.
Los gobernantes o líderes demócratas mundiales disertan sobre
sus actuaciones, y reciben de sus colaboradores y opositores, recomendaciones
para realizar mejoras en la aplicación de políticas públicas que beneficien a
sus gobernados.
El oír las opiniones emitidas por personas distintas al
entorno, ayuda al gobernante para corregir entuertos, o tal vez para conocer de
otros lo que no le dicen sus cercanos.
Venezuela vive un escenario de dificultad provocado por sus
actuales gobernantes. La inflación cierra por tercer año consecutivo como la
más alta del mundo.
El crecimiento de la
pobreza, inseguridad, escasez, corrupción, impunidad y violación a los derechos
humanos, es alarmante y sin solución concreta.
El régimen ha centrado sus esfuerzos en someter a la
injusticia a los ciudadanos.
Existen presos políticos por atreverse a señalar las
dificultades y atropellos proferidos por quienes se creen dueños del país, y
pisotean los acuerdos de convivencia que como República se encuentran
establecidos en la carta magna.
Los resultados electorales del 6D consiguieron desprevenidos
a los altos jerarcas gubernamentales, quienes pretendían su reacomodo para
seguir usufructuando las mieles del poder corrompido e inmoral, y ahora intentan
desconocer la voluntad del soberano.
Impugnan elecciones, para evitar ser revisados y evaluados en
sus actuaciones y responsabilidades gubernamentales, pasando sus camaradas del
CNE a ser ahora tramposos, o simplemente están demostrando que ellos han cometido
fraude en procesos anteriores. Queda la duda.
Voces arrogantes, cargadas de ignorancia, amantes de la
violencia, se oyen públicamente para amedrentar, crear temor y arrinconar al
contrario, con mensajes que merecen la cárcel, tales como: “al que se voltee
hay que darle un tiro en la frente”, sin verse la reacción de los organismos
encargados de frenar tales amenazas.
El defensor del puesto no se sabe si existe; quien regenta la
fiscalía debe estar en el baño porque la diarrea no la deja subir el blúmer,
pero se lo vive en una cantaleta; de la justicia ni hablar, se cobran y se dan
el vuelto.
El actual Presidente de la República amenaza a los ciudadanos
con quitarles los vehículos chinos (taxis), otorgados para comprar conciencias
en la campaña electoral para las elecciones del 6D, porque no votaron por su
propuesta.
Igual acontecimiento sucede con el otorgamiento de viviendas
y otros beneficios materiales suministrados a un sector de la población en
tiempos de campaña.
No le basta la desproporción y el abuso de poder al
mandatario nacional, quien en correspondencia con el actual Presidente de la
Asamblea Nacional, llaman a los denominados colectivos armados a sabotear el
acto de instalación de la nueva AN.
Acontecimiento demandado por juristas de carrera como un acto
de rebelión, y que seguro no encontrará asidero en los representantes de un
poder judicial corrompido, con ausencia permanente de la moral y las buenas
costumbres.
2016 es un sueño para el cambio. El retorno de la
institucionalidad, la aprobación de Leyes dirigidas a corregir los entuertos
producto de la ignorancia y la insensatez política, y el combate certero a la
impunidad.
2016 es el año del combate a la escasez e inseguridad; la
revitalización de la democracia y el inicio de un nuevo amanecer. Es el año de
terminar con la locura gubernamental. 2016, un sueño que comienza el 5 de
enero.
FELIZ AÑO 2016.
@JARTUROMS1